Resistencias variables
Las resistencias variables se subdividen en potenciómetros y en reóstatos, son elaborados con polvo de carbón y alambre arrollado. Los primeros son más comunes en el mercado. Sobre una superficie de material aislante, se deposita una capa de carbón en línea recta o semicírculo. Entre los extremos del potenciómetro se obtienen los terminales A y C, entre cuyos terminales se establece el valor fijo señalado por el mismo.
Sobre la superficie se dispone un contacto móvil metálico denominado CURSOR que permite deslizarse sobre la fina capa de carbón. Dependiendo de la posición del cursor, así se determina el valor desde cero ohmios, hasta el valor fijo máximo.
Los potenciómetros y reóstatos se producen en diversas formas y valores. El potenciómetro consta de tres (3) terminales y los reóstatos suelen tener dos (2), éstos últimos, tienen un terminal fijo y el otro está unido al cursor. El movimiento del cursor en el potenciómetro se realiza mediante un eje ó mando, para ajustarse desde el exterior. El reóstato funciona bajo el mismo principio del potenciómetro, pero con la diferencia que el movimiento se realiza mediante una ranura, para ajustarse con atornilladore de pala o estrella.